top of page

Transformándome durante la cuarentena

  • Foto del escritor: Eugenia Tovar
    Eugenia Tovar
  • 19 abr 2020
  • 3 Min. de lectura

Si llegaste aquí luego de ver mi publicación en instagram, GRACIAS.

Si estas aquí y aún no has visto ese video, puedes hacerlo siguiendo el siguiente enlace:

La primera semana estuve muy enferma y con mucho dolor de espalda hasta la segunda.

No me podía mover. Ese dolor inició justo el día antes de que cerraran todo, que nos pasamos un día completo en la escuela de danza hablando del virus.

Inmediatamente supe que esto estaba conectado con algo que iba más allá.


No había hecho nada raro que me hubiese podido generar un dolor tan fuerte, tuve incluso que recurrir a analgésicos, que hace tiempo no consumía, porque prefiero no tragar químicos que me hacen sentir que el problema ya se solucionó, cuando no es cierto.


Desde ese día decidí que ya era suficiente, algo tenía que cambiar necesariamente en mi relación con mi cuerpo, que pese a que a partir de la segunda parte del programa que me transformó (TWV) había mejorado muchísimo, llegándome a hacer sentir genial para hasta finales de Octubre, poco a poco con el ajetreado ritmo de vida que empecé a vivir en Barcelona, lo había dejado atrás.


Durante ese tiempo descubrí el YOGA, después de haber estado toda mi vida entrenando fuertemente mi cuerpo, me encontré con esta herramienta que me hizo sentir y conectar mi cuerpo con mi mente a través de la respiración de una forma consciente y sana, entre otras muchas cosas.


Quería volver a ese lugar y organicé mi plan para hacerlo usando todas las pautas que aprendí con TOWARDS VIVENCIA.


Hace más de 21 días, después de superar esa fase de enfermedad y ansiedad auto destructiva, comencé con mi rutina. Esta consistía principalmente en movilizar mi cuerpo de forma consciente y amorosa. Retomé el BIKRAM YOGA, disciplina de la que ya me había enamorado en el verano, porque había experimentado todos sus maravillosos beneficios en cada célula de mi ser y en todos los aspectos de mi vida, gracias a que la escuela empezó a ofrecer clases gratuitas online y me siento súper agradecida por esa oportunidad que nos dan. Fui consistente con la meditación y volví a las respiraciones de Wim Hof, el ayuno intermitente, que ya sabía el bien que me hacía y muchas otras más de las que preferiré hablarles más adelante para no hacer más larga esta publicación.


Estas prácticas me han estado ayudando todos estos días a liberar, aceptar y sentirme feliz siendo la persona que realmente soy. La mejor versión de mí misma, esa persona que siempre quise ser, esa persona de la que me enamoraría.


Y lo más importante, no lo he conseguido desde un lugar de exigencia, buscando siempre la perfección, como solía tratar de hacerlo, sino desde el amor y la escucha de mi cuerpo, este espacio en el que he estado siempre "encerrada" y ha sido realmente increíble.


Todos somos poderosos y podemos ser lo que queramos ser, no hay nadie, ni nada, ni un virus, ni una pandemia, ni siquiera la apocalipsis o algún meteorito, que pueda detenerte si TÚ lo determinas así, LA MENTE ES PODEROSA.


Si quieres saber más acerca de mis experiencias con estas prácticas, subscríbete a mi canal de youtube, allí estaré compartiendo además de clases y entrenamientos, más acerca de mi historia y mis procesos.


ree

Pd: Espero no herir ninguna susceptibilidad con este post, sé que es un momento complicado en la historia, pero yo no voy a seguir hablando de lo que todos hablan, mi canal va del amor y la superación.


 
 
 

Comentarios


  • Instagram
  • Facebook
  • YouTube
  • Vimeo

©2019 por Eugenia Tovar. Creada con Wix.com

bottom of page